Esta carne
marchita
Estoy cansado de
mi rota vida
de llorar
por las esquinas
ni que nadie
lo perciba
sin que a
nadie le importe
cansado de
la ruina de mi cuerpo
habiendo
perdido los años
esperando
que llegara
alguien que
lo deseara
cuando la lozanía
lo iluminaba
ahora
derrotado más que cansado
dejando
pasar las horas, los días
decrepito
cuerpo ajado por el tiempo
olvidado en
un rincón de cualquier calle
durmiendo
sobre mi vomito mental
mendigando
un beso una caricia
demacrado
macilento ojeroso
noches
desvelado sin pegar un ojo
soñando
despierto enajenado
intentando
pegar los trozos
que quedan
de mi rota vida
acariciando
en las sombras
esta carne
marchita y arrugada
por tanto
tiempo desperdiciada
oliendo el
final cada día más cercano
tránsito por
la senda del olvido
junto a
otros que igual que yo mendigan
otro beso,
otra caricia un abrazo
de aquellos
que un día quizá no lejano
dijeron amar
y disfrutaron de la lozanía
de una piel
y una carne ya marchita
que las
mismas caricias hoy necesita
estoy
cansado de mi rota vida
de recordar
lo que otros ya olvidan
esperando inútilmente
que llegara
quien ni
olvidase ni se alejara
© gghr…
11-2016